Páginas

24 de marzo de 2012

Bomberos en emergencia

Los bomberos de Florencia atienden un accidente reciente.
A los múltiples problemas que afronta el municipio, infortunadamente agreguemos la crisis que atraviesa su Cuerpo de Bomberos Voluntarios. Las necesidades ascienden a los 1.020 millones anuales, pero con 510 millones podrían seguir prestando su invaluable e imprescindible servicio a la ciudad. El Cuerpo de Bomberos Voluntarios merece todo nuestro apoyo.
Con 46 años de antigüedad, los Bomberos de Florencia son una de las instituciones que gozan de alto reconocimiento positivo entre la ciudadanía. Ya quisieran otras instituciones tener tan importante activo intangible.

Pero como toda organización humana está integrada por seres de carne y hueso que necesitan ganar honrada y merecidamente el pan de cada día; así como recursos y tecnologías con las cuales hacer frente a una de las labores de mayor nivel de riesgo: apagar incendios, además de atender todo tipo de emergencias, contribuyendo a salvar vidas.

Vale la pena hacer hincapié en dos aspectos de la mayor importancia, contenidos en la Ley 322 de 1996 que crea el Sistema nacional de Bomberos de Colombia. El primero de estos aspectos a que haga alusión, es la definición, con la cual concuerdo, según la cual “la prevención de incendios es responsabilidad de todas las autoridades y de los habitantes del territorio colombiano” (artículo 1 Ley 322 de 1996).

Esto nos hace a todos los colombianos no solo responsables de prevenir o mitigar el riesgo en aquellos actos o actividades que puedan derivar en un incendio, sino que nos hace responsables de la existencia de los cuerpos de bomberos.

El otro aspecto, clave frente a la dificultad presupuestaria que atraviesan los bomberos de Florencia, es que su servicio se define en virtud de la ley como un servicio público esencial a cargo del Estado: “la prevención y control de incendios y demás calamidades conexas a cargo de las instituciones bomberiles, es un servicio público esencial a cargo del Estado. Es deber del Estado asegurar su prestación eficiente a todos los habitantes del territorio nacional, en forma directa o por medio de los Cuerpos de Bomberos Voluntarios” (artículo 2 Ley 322 de 1996)

Una labor que salva vidas. Mosaico.
Cito esto porque tengo la impresión que la Administración de Florencia tienen otro entendimiento de la ley la ignora. No de otra manera puede uno entender el trato displicente e indiferente que la señora alcaldesa María Susana Portela y su secretario de Gobierno parecer dar al problema, al menos en las declaraciones ofrecidas en la radio e incluso en las reuniones sostenidas por estos días entre el Gobierno y las directivas bomberiles, según tengo entendido. Por ejemplo, el señor Triana ha calificado de “caprichos” las necesidades de los bomberos.

No tienen como pagar los salarios, los trajes están rotos y remendados y son insuficientes; no hay como comprar un galón de gasolina para mover las máquinas, las llantas de los automotores ya casi muestran los alambres, no tienen cómo atender en forma apropiada y segura emergencias acuáticas; y a todo esto señor secretario de Gobierno llama “caprichos”.

El municipio recauda por sobretasa bomberil 290 millones. Pero las necesidades actuales del Cuerpo de Bomberos de Florencia ascienden a los 1.020 millones de pesos, según me explicó con de detalle su comandante, sargento Humberto Alturo Taborda.

Según el sargento Taborda el presupuesto mínimo de subsistencia es de 510 millones anuales, es decir 220 millones adicionales al recaudo de sobretasa bomberil. Es un esfuerzo presupuestal que el Municipio debe hacer, además de encontrar otras soluciones de largo, con el concurso del Concejo de Florencia.

Así que a todas luces, se requiere que el Municipio destine recursos de libre inversión o de otra fuente para cubrir las necesidades de cuerpo local de bomberos, que entre otras, es parte esencial del Sistema Local para la Prevención y Atención de Desastres.

La señora alcaldesa Portela a mi juicio hace mal en amenazar al cuerpo de bomberos con no contratar con éste los servicios bomberiles que por definición de la ley son responsabilidad del Estado. Primero, por es una falta de consideración para con una institución que ha acompañado el desarrollo de la ciudad durante más de nueve lustros; segundo porque es más costoso la creación de un cuerpo de bomberos oficiales con el subsiguiente riesgo de politizar una entidad que estar fuera del juego político; y porque con esa actitud no resuelve nada y denota incompetencia. Cabe recordad que una vez la doctora Portela, siendo diputada, exclamó, palabras más, palabras menos, que no era posible que los bomberos pidieran limosnas. Bueno, ahora esa oportunidad de cambio está es sus manos.

Así que, me uno a la inmensa mayoría de los ciudadanos de Florencia que reclamamos una pronta y justa solución, para que la ciudad siga contando con el servicio profesional y abnegado que nos brinda, para orgullo propio nuestro Cuerpo de Bomberos Voluntarios.

1 comentario:

  1. SEÑOR CONCEJAL, GRACIAS POR SU APOYO DESDE ESTE ESPACIO POR LOS BOMBEROS DE LA CIUDAD, ES MENESTER QUE LA CIUDADANIA SEPA LA VERDAD SOBRE LA INSTITUCION...

    ResponderEliminar